Almidón de tapioca, sus usos fuera de la cocina

ORIGEN

Este tubérculo es originario de las regiones amazónicas de Brasil y durante años se ha extendido por toda América del Sur y zonas tropicales y subtropicales de Asia y África. Aunque su uso más común se encuentra en la cocina, este almidón posee una amplia gama de aplicaciones fuera de la gastronomía. como la industria farmacéutica, textil y en la cosmética.

Cuidado facial:

El almidón de tapioca posee propiedades cicatrizantes, antiinflamatorias y antioxidantes. En ese sentido, este ingrediente es perfecto para ayudar a reducir las manchas de la edad, las cicatrices del acné y otro tipo de imperfecciones de la piel.

Seborregulador:

A través de su uso tópico es capaz de absorber el aceite de las pieles grasas y contribuye a equilibrar la producción de sebo del rostro resultando muy útil para productos destinados a pieles grasas o mixtas.

Textura suave:

El almidón de mandioca tiene una textura fina y suave, lo que lo hace adecuado para productos de maquillaje como polvos faciales, bases en polvo y polvos translúcidos. Ayuda a crear una superficie suave y uniforme en la piel.

Cuidado capilar:

El almidón de mandioca también se utiliza en productos para el cuidado del cabello, como champús en seco y productos de peinado. Puede ayudar a eliminar la grasa del cuero cabelludo y dar volumen al cabello.

Muchas personas buscan productos de belleza y cuidado personal con ingredientes naturales. El almidón de tapioca es uno de los ingredientes que utilizamos para nuestros productos tanto por su origen natural como por su versatilidad.

En todos los casos, es importante tener en cuenta las necesidades específicas de cada piel y consultar a un dermatólogo antes de comenzar cualquier tratamiento.