Para comenzar con el juego de las sombras, es fundamental conocer nuestro tono de piel y así, el tipo de sombra que mejor se adapta a nuestra tez:
Si eres de piel blanca los tonos en sombras son los neutros como rosas, verde o marfil.
Si eres de piel media clara los tonos adecuados son los grises, lavanda o azules.
Si eres de piel media oscura o morena los tonos perfectos para tu tipo de piel son los verdes, naranja, rojo, caramelos, bronce dorado o marrón.
Si eres de piel oscura o ébano los tonos que te favorecen son los violetas, azules o verdes.
Ahora sí, ¡Que comience el juego! ¿Cómo combinar tu look con el maquillaje?